domingo, julio 29, 2007

Jacinta Pichimahuida hoy se siente contenta

Honestidad pura, si por algo se le quiere -y se le odia- es porque no anda con medias tintas, siempre dice lo que piensa y no le importa si los demás están de acuerdo con él.

No dice las cosas por agradar y eso lo supe desde el primer día que entré a su salón de clases. Este hombre de más de sesenta, apasionado por el teatro, contestatario, honesto y engreidor es Alonso Alegría . El profesor que andaba en poncho por los pasillos de la facultad, apodado por algunos palomillas como "El amo del calabozo", simplemente Alonso para sus alumnos, colegas y amigos de toda edad.

Un profesor que siempre supo como motivarnos, como empujarnos a ver más allá del salón de clases. Durante tres ciclos lo que más disfrutaba era asistir a sus clases de dramaturgía. A él no le bastaban las horas reglamentarias, se podía quedar con nosotros una, dos, tres, "n" horas más hasta que termináramos de presentar nuestros libretos.

Nunca olvidaré su legendario exámen que duraba toda una tarde de sábado, él siempre nos permitía utilizar todo el material de consulta disponible porque no se trataba de un examen donde respondías de paporreta sino para desarrollar utilizando las herramientas que te había dado en clase.

No solo nos apoyaba en dramaturgía, también participó como actor en varios de nuestros cortos, fue comentarista en debates de radio y hasta personaje a fotografiar en el curso de documental.
Fue uno de los pocos profesores que vi participando en una sesión estudiantil, escuchando lo que los alumnos de la facultad tenían que decir y también participando en nuestras fiestas y comilonas. No tenía problemas en compartir sus cigarros Rothmans con nosotros, pero ese vicio "ya fue", desde que le colocaron un by-pass en el corazón allá por el año 2003.

Tener noticias suyas hoy me hizo muy feliz, sobretodo a través de un testimonio que escribió en la sección Dominical de El Comercio. En esta edición se hizo una conmemoración sobre los 40 años de la muerte de su padre, el escritor Ciro Alegría.

Alonso con la honestidad de siempre, sin nada de cursilerias pero de un modo entrañable escribe una crónica sobre el primer encuentro que tuvo con su padre (El día que a mi padre le dije tío).

viernes, julio 27, 2007

El descargo de Jacinta Pichimahuida (o de la maistra Jimena)

Todos alguna vez hemos sufrido a un profesor así: perfeccionista, sarcástico e intolerante. Ese que sabe como desmotivarte en pocos días. Pensé que ya no viviría esa misma experiencia otra vez, pero me equivoqué. Por un momento creí que era mi imaginación, un prejuicio por conocer a alguien diferente, pero con el paso de los días me di cuenta que no era solo mi impresión sino el de otros compañeros más. Lástima que no lleguemos ni a la mitad del salón -al menos eso no se ha podido verificar por falta de confianza.

En el colegio donde trabajo los niños siempre tienen quejas de sus profesores, me imagino que de mi también porque tampoco uno le puedo caer bien a todos. Haciendo un balance del último año, me parece que necesito cambiar de centro de labores. Ha sido una grata experiencia trabajar en un colegio cuatro años pero creo que cuando uno ya no puede reinventarse, se desgasta y su desempeño ya no es el mismo.

La misión de un profesor es que los alumnos se sientan cómodos y se interesen por el curso, sobretodo porque yo enseño a niños y a adolescentes, que tienen tantas actividades a su corta edad que a veces no pueden concentrarse en un solo curso.

Enseñar a adultos es un panorama distinto, de hecho los adultos están allí porque realmente les interesa invertir en su educación y no por obligación ni por la nota. ¿Entonces por qué ser intolerante con el cliente? No lo entiendo, que fea forma de marketearse.

jueves, julio 26, 2007

Un saludo por Fiestas Patrias

"Vivo en un país maravilloso,lleno de riqueza y voluntad, Dios pintó mi alma blanco y rojo y por nada cambio este lugar.Mi pueblo es valiente y generoso, pobre pero rico en dignidad y ni el sufrimiento ni el enojo le han hecho que deje de danzar". (Luis Enrique Ascoy)

Un abrazo cálido y fraterno por Fiestas Patrias a todos mis familiares, amigos y bloggers que se encuentran lejos del terruño.
Dedicado a: Nilda, Jane, Edith, Fernando, Pattyux, Maggie, Sayuri, Kuni, Kaori, Patty, Vanessa, Susumo, Gaby, Gerardo, Kelly, Margola, Margarita, Miluska, Celina, Sonia, Dalila, Yahayda, Heidi, Micke, Sandrita, Tía Lauris, Marea, Alfredo, Truly, Racurock... Uff la lista es larga ( y cada día se hace más larga)

Tengo la seguridad que ellos -aunque viven a miles de kilómetros- tienen bien presente lo que significa ser peruano y añoran el día en que puedan volver al hogar, a pesar de todos los problemas que puedan existir, siempre se sientan acogidos y queridos.

Con mucho cariño,
Mafa


Iba a enviarles un Pisco peruano de exportación, pero al final no atracaron en la aduana : (

jueves, julio 19, 2007

Treinta y seis be

Si Papá Noel existiera, hace como 11 años me hubiese hecho el mejor regalo de todos en Navidad, pero ya la ví, Papá Noel no existe. Ahora sé que si yo quiero conseguir algo lo haré con mis propios medios.

¿Qué parte no me gusta de mi anatomía? No me gustan mis senos. Vamos a llamar esta parte superior del cuerpo de la mujer por su nombre, nada de chichis, teresas, teteras, pechugas, etc. No señoritas, no señoras, no señores, en este blog se dicen las cosas por su nombre: los SENOS de esta blogger (o la falta de ellos) será el tema de hoy.

Usé mi primer formador cuando tenía 10 y estaba en sexto de primaria, después en secundaria pasé a usar un brasier talla 32 B, finalmente cuando tenía 16 años y unas carnes extras en mi apachurrable espalda me quedé en 34 B.

La mujeres mayores a mi alrededor siempre decían "No te preocupes cuando termine tu desarrollo crecerán". Otras mujeres con más experiencias en los placeres de la carne decían "Cuando empieces a tener relaciones sexuales te van a crecer". Hasta tuve que escuchar la voz de ciertos varones que me consolaban diciendo "Todo se arreglará con una buena mano". Palabras, palabras, palabras y años, años de espera.

Cuando era una adolescente, me recomendaron ese clásico ejercicio que consiste en presionar las palmas de las manos a la altura del pecho varias veces por 5 minutos durante la mañana, la tarde y la noche. Se suponía que la contracción a la larga haría el milagro, pero nada. Incluso mi mamá se enteró de la técnica de la ducha española para potenciar el crecimiento de los senos y... sí, lo admito hasta eso intenté.

Ninguna teoría ni práctica le han servido a la que escribe y por allí siempre queda el comentario de mi benevolente madre que dice "Cuando seas mamá...". No, no y no, yo quiero ser mamacita (más sí se puede :P) antes de ser madre. Así que si el Rojo ha empezado a ahorra parar su viaje a la Antártida, yo por qué no puedo ahorrar para unos senos talla 36 B (De repente si me pongo ambiciosa 36 C).

Por mucho tiempo me negué a esa salida, vi demasiados programas de extreme make over para desanimarme, hasta en los últimos años le dije SÍ al Wonder Bra, pero obvio que uno no lleva esta prenda a la playa o a la piscina, no?

Sí desde hace unos años todo lo que quiero lo consigo a costa de mucho ahorro y harta chamba, por qué no aumentar mis medidas al menos las que están debajo del cuello (las otras las tengo que disminuir en el gimnasio y diciéndole NO por un tiempito a los placeres culinarios).

No sé cuanto cuesten y de hecho que una maestria tiene la prioridad en mi chanchito, pero el segundo -y no menos importante- lugar lo ocupan mi futuro par 36B. Me prometí sacar mi título a más tardar a los 26 y lo cumplí, pues mi siguiente deseo también tiene una fecha límite y son mis 30. En 3 años y 5 meses espero cumplir con esta nueva meta.

Por mientras dejaré que el final mi espalda continúe siendo mi bien más (a)preciado, de él no me puedo quejar. En algo la tenía que tinkar la madre naturaleza, ¿no?

lunes, julio 16, 2007

El tango del beso de moza

Eres un delicado centro de crema de merengue cubierto de una fina capa de chocolate bitter que en perfecta armonia reposa sobre una base de crujiente galleta.

Eres una delicia de golosina que nunca falta en bodegas, panaderías, supermercados y hasta te paseas glamorosa en la vía pública.

¡Qué bueno que tus besos estén disponibles a toda hora y en todo lugar! Un beso tan tierno y suave que no está censurado para ninguna clase de público y que en invierno cae del cielo como una bendición azucarada.

Lo único malo es que uno tiene que pagar por tus besos, sé que es una suma humilde, pero me decepciona saber que la transacción está allí. Porque no se puede hacer nada, el amor por las golosinas es así y tú moza, nunca cambiaras. Siempre tengo que pagar antes de experimentar el placer que produces al encuentro de mis sentidos.

Hoy lamento informarte delicada moza, que entre tus besos y los besos del mozo me quedo con los que me brinda el segundo. Sí, lo sé, soy una traicionera.

¿Qué te puedo decir moza? Los besos del mozo los puedo repetir una y otra vez sin remordimiento, sin miedo al colesterol y a quedarme sin el pasaje de combi.

Acaso tú moza salerosa ¿Me llamas por teléfono? ¿Me das tu cariño con rimas? ¿Timbras a mi puerta? No moza, nunca lo hiciste a pesar que te entregué mi devoción incondicional desde una edad temprana.


Tú siempre eras distante, acompañada de tus otras hermanitas, de tus iguales, con esos aires de superioridad. ¡Doblegando mi fuerza de voluntad en período de dieta! Cuantas veces después de nuestros encuentros me sentí vil y culpable por caer hipnotizada a tu embrujo.

¡En manchita andabas desgraciada, coqueteando a todos detrás del mostrador, nunca fuíste fiel a pesar de todas las veces que me refugié en tus caricias fútiles!

El mozo aunque está en vitrina, no vino a mi protegido por un ejército, vino solo y se las jugó por mi. Ten la seguridad que los besos del mozo nunca son los mismos y pueden ser igual o más placenteros en cada oportunidad.

Mira moza, lo nuestro se acabó, este invierno al parecer el mozo está dispuesto a quedarse y no pretendo hacer que cambie de opinión. Sí te ví, no me acuerdo y ay de tí que te me acerques cuando el mozo se despide a mi puerta.


No me pongas trampas que no cederé a tu encanto.






Y acabo de alumbrar al número 100 de mis posts, este parto ha sido placentero y tal vez mis otros 99 hijos se pongan un poco celosos o picones pero podré vivir con este dulce remordimiento.

Saludos y gracias a los pasajeros que siempre suben por esta ruta :D

viernes, julio 13, 2007

Dilo con rosas


Me gustan las rosas, me gustan en el jardín,
pero más me gustan en caja
llevando una tarjeta dedicada para mí.

Mi mamá me sorprendió ayer por la mañana. Se las había ingeniado para hacerme llegar una docena de rosas con motivo de mi titulación.

Contener las lágrimas fue imposible aunque hace un tiempo había prometido no llorar, pero esta vez no pude cumplir mi palabra, estaba demasiado emocionada por el detalle de la persona que más me ama en el mundo (Al menos la que encabeza el ranking con 26 años acumulados).

La felicidad en ese momento vino acompañada de muchas lágrimas, no recuerdo la última vez que felicidad y lágrimas combinaron tan a la perfección. Lloré unos minutos en casa y la máquina de llanto continúo en el taxi mientras le mandaba mensajes de texto a dos personas muy queridas para contarles mi sorpresa.

Una de ellas me envío el siguiente mensaje:

Las mamis y sus detalles incomparables, a pesar de todas las diferencias es innegable que nos aman demasiado...

Esta mañana hablé con mi mamá, quien estaba con muchas ganas de saber como había sido mi graduación. Quería todos los detalles y no tuve reparos en describir gran parte de la noche anterior. No imaginé que hoy por teléfono lloraría una vez más cuando mi madre confesó el nombre de su cómplice en Lima. Me dejó anonadada, fue una coincidencia maravillosa que esa persona haya sido quien me envío el mensaje que líneas arriba transcribí.

Realmente a esta persona la quiero mucho y hace como un mes le dediqué la mitad de un post.

¡Gracias querida amiga por tan linda sorpresa! Solo quiero añadir que me siento afortunada porque mi mamá te tiene tanta confianza y que con el tiempo espero que nuestro cariño se fortalezca para siempre contar la una con la otra.



Mamá:

Es la segunda vez que me mandas tu amor en rosas (La primera vez también me sorprendiste) y saber que te sientes tan orgullosa de mis avances me hace querer ser mejor cada día.

Besos desde mi Lima gris a tu isla encantada,

Laura


Y al tercer personaje de este post le digo: Los pétalos de rosas y la rima también estimulan mi ritmo cardíaco. Un beso

miércoles, julio 11, 2007

Estabilidad (Segundo Acto)

Ella: Una chica mayor de 25, que últimamente anda reflexiva.
Él: Un hombre que casi le dobla la edad a Ella, padre y esposo, ex colega y buen amigo.

Escenario: Un café muy concurrido. Ambos sentados frente a frente, rodeados por otras mesas con bastantes personas en ellas.




Él: Sabes en el fondo qué sienten los hombres cuando ven a una mujer con empuje, una mujer que tiene las cosas claras.

Ella: ¿Qué?

Él: Con esta chica me saco la lotería.

Ella: Bueno pero también hay hombres con empuje y que tienen las cosas claras.

Él: Sí, claro pero a ese tipo de hombres no están con este tipo de mujeres, en cambio un hombre que no tiene las cosas claras al ver a una mujer que si las tiene, quiere arrimarse a ese buen árbol por la sombra que da y así se siente más seguro y protegido, y si la chica tiene una conducta maternal te imaginas qué puede pasar.

Ella: Sí lo imagino, ella va a ser la mamá en la relación y el hombre se va a acostumbrar ¡Qué complicado! Ambos con el tiempo se van a acostumbrar a esos roles.
.
.
.
Creo que en el fondo todos buscamos una pareja que nos de seguridad y confianza, que nos ayude a sacar lo mejor de nosotros mismos.

Él: Pero esa tarea solo depende de cada uno, la otra persona no puede hacer milagros, ni tomar la responsabilidad por el otro.

Ella: Sí pues es una tarea individual.

domingo, julio 08, 2007

Una carta más



Mamá:


Celebré por adelantado tu cumple y recibí las doce contemplando un espectáculo de danzas multicolores en un lugar que sé te gustaría conocer. También bailé un montón en tu honor haciendo equilibrismo a 7 centímentros del suelo.

Varias horas antes de la medianoche cuando mi amigo Mark vio mi cara de angustia antes de subir a un tercer piso, me dijo: "Asume tu responsabilidad gordita, por algo te compraste unas botas con semejantes tacos". Asumí el gusto de verme más alta, me costó y hubo harto bamboleo pero igual lo asumí con entereza.

En cambio a ti te basta con un poco de rimel y algo de lápiz labial, no estás interesada en calzar semejantes tacos, no eres esclava de la moda y ese ejemplo seguí por muchos años, pero sabes mamá siempre es bueno cambiar el look para algunas ocasiones especiales. (Presiento que aprobé con B+ el curso intensivo de "zancos 1")

Hace años que no pasamos este día juntas, pero siempre nos desquitamos con creces cuando estás por aquí, no? Te espero para comernos una lasagna en el Mavery y por supuesto acompañarla con un buen tinto.

Quise escanear una foto nuestra de allá por los 80' pero no me había fijado en la particularidad del enchufe que tiene el escaner. Me vine a dar cuenta casi 5 años después. Prometo arreglar ese asunto esta semana y dejar de ser cavernícola punto com.

Hoy puse la alarma temprano y pude escuchar tu voz, una españolita amigable me comunicó contigo en un santiamén. Tú esperabas mi llamada e hiciste un alto en tus obligaciones para que te saludara y me contaste de la reunión que ibas a tener con mis tíos por la noche.

Me imagino que mi tía Edith preparó un arroz con pollo de campeonato y espero que se haya acompañado con algún rico trago, obra y gracia del tío Fer. Seguro bebiste tu famoso "shandi", un poco de fanta limón más cerveza, extravangancias de toda una isleña.

Quiero que sepas que el 8 siempre será mi segundo número favorito y que julio con todo y el frío me hace sentir protegida y amada.

Todo mi amor de Lima a Menorca,

Laura

viernes, julio 06, 2007

Bocona tienes que cambiar algún día

No, no se trata de Magaly Medina. Soy de las personas que dan mucha información, sí recontra chismosa, no me guardo nada, ni lo mío ni lo ajeno pero aún así la gente me tiene confianza¡¡POR QUÉEEEEEEEE!!

No lo hago todo el tiempo y no es que ande preguntándole a la gente sobre su vida para tener tema de conversación. No es que me ponga a intercambiar información con alguien que conocí en la combi. Eso sería de lo más bajo, ruín y despreciable del mundo. Lo que sucede es que a veces uno escucha algo que cree involucra a sus amigos y termina haciendo de radio bemba supuestamente por el bien de otros, pero allí es donde mete las cuatro patas de animal al involucrarse sin tener que ver con el problema.

Los problemas son de a dos, los tríos aquí no sirven.

Creo que no me ha pasado una vez, ni dos, sino muchas veces y me hace sentir que no tengo remedio, que en vez de avanzar retrocedo. Que fácil puede ser convertirse en la chismosa del rrioba!!! Puntos en contra para mi, quiero ser mejor y no un insecto rastrero.
Uno no puede dejar que te arrastren al chisme, debe contenerse con todas sus fuerzas, no puede ser tan difícil o sí?

miércoles, julio 04, 2007

Menos Tele (Día 78) el Dr. Cox mejor que nunca

No me había olvidado de mi dieta antitele, mejor dicho continuo y voy bastante bien, cada vez veo menos tele y mantengo mi vida ocupada en asuntos más importantes: una larga lista actividades académicas, encuentros con gente querida nueva y añorada, el cine, las fiestas, mis aventuras con Pisco, las clases de manejo, el blog, mi redescubrimiento interior, etc.

El viernes volví al gimnasio después de ser perseguida por una persistente vendedora que me ofreció el oro y el moro para matricularme bastante tiempo después de que una serie de ofertas acabaran.

Hace como dos años lo único que me hacía madrugar para ir al gimnasio golpe de 7 a.m era el cable, como no tenía en casa aprovechaba mi estadia en el gimnasio para ver "Dawson`s Creek", "The Nanny", etc. Sí lo sé, media monse mi confesión pero esa era mi motivación principal. Luego de tres meses me puse el cable y mis horas de entrenamiento semanal disminuyeron.

Hoy llegué al gimnasio y me di con la sorpresa que todavía mi rutina no estaba hecha, así que sin hacerme mala sangre (bueno solo un poquito) me instalé en las máquinas cardiovasculares y en eso empezó la repetición de SCRUBS.

Este sitcom sucede en el hospital Sagrado Corazón, el protagonista principal es John Dorian "JD" un joven doctor al final de sus veinte que es cándido, bonachón, con temores como cualquier ser humano y que tiene situaciones de todo tipo con amigos doctores, enfermeras, administrativos y de mantenimiento. Cada uno de ellos está más loco que el otro, pero en el fondo son buenas personas que se esmeran en lo que hacen y tienen diferentes motivaciones personales para continuar en el hospital.

Mi personaje favorito es el Dr. Perry Cox , el sarcástico mentor de JD intérpretado por John C. McGinley . Este tipo trata a JD como una zapatilla, lo llama con diferentes nombres de mujer, le hace sentir que siempre será un residente inútil y a pesar de todo el "novato" le tiene ley.

En el capítulo de hoy Cox hace notar a sus residentes en la vida real no todo tiene que ser como en la serie "Dr. House", que los casos que aparecen en esa serie no se dan todos los días y un doctor con semejante experiencia y aplomo tampoco existe, pero casi al final del capítulo el dr. Cox resuelve la mayoría de problemas con el estilo particular de House (con bastón incluido).

Perry Cox es el antihéroe de la serie, no tiene modales, maltrata a medio mundo (hasta su propio hijo), es narcisista, pero siempre está dispuesto a resolver los casos más díficial a nivel profesional y personal. Es un personaje con muchos matices y que ha sido desarrollado bastante bien a través de las 6 temporadas de la serie.

martes, julio 03, 2007

Una drama queen y un perro prófugo bajo la lluvia

Me desarmé totalmente. Mis defensas cedieron una hora antes de la medianoche, la renitis y algo de cansancio conspiraron en mi contra. Mi grillo se quedó jataso o quizás prefirió que me las arreglara sola porque no quería salir de su escondite a tan baja temperatura.

"Me llamo Mafa y soy una drama queen. Tengo facilidad con las lágrimas, en cualquier momento y en cualquier lugar."

Vaya espectáculo. Otra vez en pijama, pantalón de lana negro (esos de diez soles que venden en el mercado) chompa de alpinista y babuchas rosadas. Histérica porque las tres puertas se abrieron de par en par a la vez ( la puerta de mi departamento, la del primer piso y la de la entrada principal) y el escapista de cuatro patas aprovechó el momento para emprender a la fuga por segunda vez este año, lo malo que el personaje que corría muy cerca del prófugo la vez pasada ya no estaba y ese espacio solo lo llenaba mi angustia.

Me quedé congelada con las pastillas de alercet en la mano y el repartidor que quería que le recibiera la boleta para poder marcharse de una vez por todas. Yo no podía correr con las babuchas porque todo estaba húmedo, solo empecé a gritar pero Pisco cada vez estaba más lejos y el vigilante asustadísimo ante mi desesperación.

Entré a mi casa a buscar la correa de la mascota y a ponerme zapatillas, pero como estaba totalmente enajenada no recordaba en que lugar estaba la dichosa correa. Me desesperé y los segundos se hicieron eternos mientras caminaba presurosa bajo la maldita garúa sin correa en la mano.

Nadie tuvo la culpa, pero yo culpaba al mundo en ese momento: a mi maldito perro que está como loco porque en casi tres años no le ha tocado merecer, a la estúpida vecina que dejó abierta la puerta del primer piso, al inoportuno vigilante que se puso arreglar las bolsas de basura con la puerta principal abierta, a mi por no encontrar la maldita correa en pocos segundos y hasta a Universal Channel por pasar esa película que siempre me deja confundida pensando sobre lo complejo que puede ser el amor y las relaciones de pareja.

Caminé como cuatro cuadras y nada, no sabía que rayos iba a ser después. Bueno si lo sabía pero pensé que hasta que él llegara a recogerme, el prófugo estaría cruzando Pershing camino a esa casa que quedaba a la espalda de Metro. A ese lugar que hace una semana prometí no volver, pero como era obvio Pisco no tenía idea que la promesa la hice por los dos. Lloré como una Magdalena, sintiéndome totalmente sola y extraviada en la húmedad de mi distrito.

A dos cuadras del edificio estaba el buen intencionado vigilante haciéndome señas para indicarme que Pisco estaba cerca. Sin correa en la mano, solo me quedaba gritar, insultando al pobre can por haberse escapado.

Fue toda una odisea hacerlo entrar al edificio de nuevo, el mal carácter de mi mascota suele asustarme y temía que al verse acorralado reaccionara mal. Unos tres vecinos vieron de cerca el final de la historia. Por un lado ellos y los vigilantes tratando de convencer al prófugo cariñosamente, mientras que yo soltaba toda mi furia en francés en medio del llanto ¡Qué patética me tuve que haber visto!

Cuando finalmente logré que Pisco entrara al edificio, tuve que voltear a mirar a los espectadores de tan humillante escena para decir: "Gracias y disculpen la molestia".

Hoy por la mañana el vigilante de turno le dijo a Pisco "No te escapes de madrugada pues" y me sentí empequeñecer al cruzar la entrada principal, solo me quedó ponerme la capucha y continuar mi rumbo hacia la panadería.



domingo, julio 01, 2007

Estabilidad

Hace un par de noches estuve tomando varias chelas con un distinguido grupo de varones, a quienes he conocido recientemente. Me llevé la grata sorpresa que compartimos cierto gusto por el cine y la televisión, además que la conversación también estuvo matizada de muchos otros temas interesantes.

Me he reído demasiado, suelta de huesos como siempre, pero a cierta hora de la madrugada el diálogo giro en torno a lo que buscan las mujeres antes de salir con un hombre. Uno de los distinguidos caballeros tenía el temor de que sus opiniones hiriesen mi suceptibilidad, yo le dije "Suéltala como te salga, por mi no te preocupes" y la soltó. Su teoría compartida por sus camaradas es que una mujer antes de salir con un prospecto chequea que el susodicho tenga varios requisitos que colmen sus expectativas, pero que principalmente tenga solvencia económica sobretodo si es que se trataba de una cita que se proyectaba al inicio de una relación seria.

Otro caballero dijo "Billetera mata galán". No fue la primera vez que escuché esa frase y no voy a negar que a mi me molesta que los hombres piensen eso. Será que nunca estuve desesperada por buscar alguien que mantenga mi nivel de vida, mis gustos y tengo la confianza que mis amigas más cercanas tampoco, por suerte todas tienen una carrera, chamba, padres, etc.

No me parece que un chico sea más interesante porque tiene carro, me interesa más que tenga un nivel intelectual igual o superior al mío. Porque con el carro no voy a ir al cine ni voy a tomar un café. Me llega a emocionar más lo que pueda decir a que tenga depa, cuenta en dólares y un cuerpaso de gimnasio. A estas alturas algunos que no me conocen deben pensar que quiero marketearme bien con los visitantes de esta combi virtual, pero los que me conocen saben que no hablo por hablar. (Mi intención no es buscar prospectos a través de este post : P)

Claro que es cómodo que te vengan a recoger en auto, no voy a decir lo contrario pero como le dije a uno de los distinguidos varones "Yo he estado acostumbrada a la combi, al micro, al taxi y hasta con mi ex hemos tomado varias veces mototaxi". Casi el 100% de mujeres que conozco buscan hombres que se proyecten, que tengan ambiciones y no estén estancados en lo mismo, más que si le pagan todos los fines de semana los tragos, piqueos, el telo, etc.

Los caballeros en la mesa también agregaron que cuando las mujeres decimos que buscamos estabilidad en una relación, nos referimos a una del tipo económico, mientras que a los hombres no les importaba que nosotras no cumplamos con ese requisito. Mis camaradas de chelas tienen toda la seguridad de que un hombre puede estar con una chica sin oficio ni beneficio, en cambio una mujer jamás.

En mi opinión creo que ni el hombre ni la mujer merece estar con una persona que no cumpla con sus expectativas: intelectuales, sentimentales, económicas, etc. Porque si no les interesa y están más emocionados con lo que vendrá al final de la cita o saliendo de un tono pues un choque y fuga no hace daño, no?

Hermanas de género, espero sus respuestas sinceras que no tengan porque agradar a nadie, ni a la que escribe.