viernes, julio 27, 2007

El descargo de Jacinta Pichimahuida (o de la maistra Jimena)

Todos alguna vez hemos sufrido a un profesor así: perfeccionista, sarcástico e intolerante. Ese que sabe como desmotivarte en pocos días. Pensé que ya no viviría esa misma experiencia otra vez, pero me equivoqué. Por un momento creí que era mi imaginación, un prejuicio por conocer a alguien diferente, pero con el paso de los días me di cuenta que no era solo mi impresión sino el de otros compañeros más. Lástima que no lleguemos ni a la mitad del salón -al menos eso no se ha podido verificar por falta de confianza.

En el colegio donde trabajo los niños siempre tienen quejas de sus profesores, me imagino que de mi también porque tampoco uno le puedo caer bien a todos. Haciendo un balance del último año, me parece que necesito cambiar de centro de labores. Ha sido una grata experiencia trabajar en un colegio cuatro años pero creo que cuando uno ya no puede reinventarse, se desgasta y su desempeño ya no es el mismo.

La misión de un profesor es que los alumnos se sientan cómodos y se interesen por el curso, sobretodo porque yo enseño a niños y a adolescentes, que tienen tantas actividades a su corta edad que a veces no pueden concentrarse en un solo curso.

Enseñar a adultos es un panorama distinto, de hecho los adultos están allí porque realmente les interesa invertir en su educación y no por obligación ni por la nota. ¿Entonces por qué ser intolerante con el cliente? No lo entiendo, que fea forma de marketearse.

5 comentarios:

RacuRock dijo...

Jacinta Pichimahuida ... me dice algo ese nombre.. pero no la encuentro en mis cajoncitos cerebrales... creo que era una cancion no?...

El perro andaluz dijo...

Hay algunos profesorcitos q se creen la caga*a y a esos habría que hacerles unos "correctivos" urgente.
Algo se te ocurrirá.
Besos.

Dragón del 96 dijo...

Mucha gente ve los trabajos como una obligacion mas que como algo que le gustaria hacer... no has visto los malos tratos en cines, tiendas, telefonica, sunat, colegios, panaderias, restaurantes y un infinito etcetera?

Y provecho con los adolescentes, alguna vez trabaje con ellos y sé que son bien pesados si les das demasiada confianza. Los niños... son peores.

Slaudos.

Mafa dijo...

Racurock: No era una canción,era un programa de televisión al estilo de Carrusel.

Allan: No se me ocurrió nada. Besos

Dragón:Si pes la gente siente que su trabajo es una obligación pero no debería ser así. Slaudos

schatz67 dijo...

Como hijo de maestros (los de antes,no estos analfabetos revoltosos del Sutep) te la explico en una:No basta con descargar conocimientos o hacer ostentación de aquellos,hay que ser PEDAGOGO para saber transmitirlos y hacer que los alumnos lleguen a internalizar el mensaje.

Hay cada huevas al frente de las aulas...

Un abrazo

Schatz